Cuando una persona piensa en una asesoría jurídica casi siempre le viene a la cabeza la palabra abogado/a. Sin embargo, la complejidad de los asuntos asumidos por la asesoría, nos ha llevado a la conclusión de que es preciso contar con un amplio equipo de profesionales especializados no solo en el ámbito jurídico sino también en el ámbito de la economía, de la ingeniería y de la arquitectura, contando para ello con un equipo de profesionales, además de los propios de la abogacía, que preparan, enfocan y desarrollan las bases y antecedentes precisos y necesarios para acometer con éxito la defensa jurídica de cualquier tema que se nos plantee.
A título de ejemplo es frecuente encontrarnos con pleitos en comunidades de vecinos donde aparecen numerosas grietas, fisuras y demás lesiones constructivas que hacen preciso además de una buena formación jurídica para resolver esos vicios constructivos, la apoyatura técnica necesaria con el arquitecto o ingeniero que avalen técnicamente la realidad de esos daños y la causa y el origen de los mismos.